Trato de
hablarte de amor y me rechazas;
Trato de
darte dulzura y caricias y no lo aceptas;
Yo no sé si
soy yo o si eres tú, el que está de caza;
Pues el cariño
se atiende, se refresca, se respeta.
Y te digo, mírame,
tócame, tómame suavemente;
Y no sé si
me aceptas o me dices provocantemente, que no;
No me
atrevo a besarte o tocarte irremediablemente, impotente,
Pues tus señas
me confunden, y me enredan y esto no es bueno.
Dame una seña,
dime si el universo es nuestro;
O si debo
aceptar mi presente, como debo enfrentar, mi futuro;
Dime si
quieres estar conmigo, un día, en un encuentro;
De cara a
cara, de beso a beso, suavemente y al mismo tiempo duro.
Dame tu si
o dame ya la cachetada;
Para despertar
o dormir pensándote;
Entrégame las
flores aunque están atadas;
A mi corazón
o empújame a morir sangrándote.
Déjame
desnudar mi alma en ti de una vez;
Déjame llorar
o disfrutarte a ti por siempre;
O quítame la
vida y destroza esta mi tez;
Que no sabe
vivir sin pensar en tu dulce vientre.
No sé cómo
separarme de ti,
No sé cómo
olvidar esta ilusión;
Pero si
pides alejarte de mí;
Te dejo y
te quiero, con toda mi pasión.
Adios….
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